Consejos No

A veces doy consejos que no son los ideales, nunca fui buen consejero, no soy bueno para esas cosas, soy de ese tipo de personas que se golpean una y otra ves con la misma pared, con esa pared que esta doblando la rotonda de la esquina y girando a la izquierda, sin embargo a veces por confiarme en que ya no esta, o en que las cosas van a ser diferentes intento cruzar ese trayecto y así me vuelvo a golpear por decimoquinta vez, y eso creo que me hace pésimo consejero por que seguramente le diga a la otra persona “ahh si, anda por ahí” no es por maldad, no es por que quiero que se golpee, es por que creo en cosas que no existen o al menos no existen del todo, creo en que si te esforzas no hay barreras posibles que te detengan, en que si una ves chocaste no te vas a volver a pegar contra lo mismo. El otro día se me venían a la cabeza preguntas como estas: ¿Se puede vivir una vida donde no habitan los sueños? ¿se puede vivir una vida vacía y sin nada? ¿se puede escribe una canción cuando no tenés tinta ni ganas de escribir? después de meditarlo por un tiempo llegue a la conclusión de que no se pueden hacer esas cosas, no se puede pintar un cuadro sin pinceles, es utópico disfrutar de ciertos momentos si no tenés ganas de pasarla bien, antes de pintar siempre tenés que cargar el pincel de tinta, de ideas, sueños y después reflejarlos en aquel lienzo blanco hasta ahora tan vacio y sin sentimientos, con tantas incertidumbres cuando lo estas haciendo, y con tanta vida, sentimiento, pasión cuando lo ves finalizado. Eso mismo pasa con los sueños, primero lo tenés que anhelar, imputar y llenar de ganas, de sentimientos, de vida. Después lo tenés ejecutar de la mejor forma, este puede salir bien o mal, eso es relativo, pero hay algo que es absoluto y es que siempre te deja algo nuevo, siempre te enseña algo,