lunes, 31 de octubre de 2011

Me Llenaste un Alma y Media Más Dos

Una mesa sola en la llanura no encuentra flores para que la adornen, mi testigo en el juicio no aclarece el panorama de sus miedos y mis ojos se llenan de fuerzas al oír el sonido de la luna saliendo de su casa en el auto del vecino. Hoy es un día como todos, menos para mi. Hoy es un día que llega después del anochecer del día pasado, digamos que un día como todos, menos para el ahorcado. Mientras tanto me pregunto ¿yo me pierdo en la calle? ¿ o la calle se pierde en mi ? vaya pregunta retorica y respuesta irrelevante, tan irrelevante para mi como el echo de que hoy separaste nuestro camino y tiraste al vacío todo lo que te ofrecí, lo que no es intrascendente es que volaste mi cielo y floreciste mis flores, que me enroscaste en tus brazos y me diste calor, que me llenaste un alma y media más dos. Los diecisiete patos que cruzaban el mar llegaron a la otra punta, así era nuestro amor, grande, como la fuerza de esos seres para cruzar sin la ayuda de nadie, como la fuerza del viento que llena cada rincón de la tormenta. Una estrella se asoma y no encuentra respuestas, ¿será que todo esto es  mentira? ¿o el mundo tiene fin en la siguiente profecía?

Hay gente que pide perdón como yo y hay gente que prefiere callar, mejor no cruzarse con ése tipo de personas, por el simple echo de que nadie puede ser tan perfecto como para no equivocarse nunca, y no hay nada peor que una persona que te trata mal y no te pide disculpas. No hay nada peor que ese mar que te ahoga y no pronuncia palabras.


Mi almohada vacía busca una caricia de su pelo, mis caricias buscan su pelo y a cambio encuentran un papel para escribir éstas palabras, palabras que nadie va a leer, palabras que se grabaron en mi corazón, como el te amo que te dije y todavía siento, como el te amo que me dijiste y se transformo en te quiero, como el abrazo que todavía te debo.

Duele que los sentimientos de otros cambien cuando los tuyos no, duele que la luna no quiera ver al sol. Da placer tener el placer de tenerte entre mis brazos. Comedores llenos de alegría, plazas vacías, sin flores violetas, una a una las fuimos arrancando y pintamos las 17 de a una por vez en nuestro corazón.

Me llenaste un alma y media más dos.

martes, 19 de julio de 2011

Palabras de DOS

Una noche de verano en una plaza por la que varias veces transite, pero a la que nunca le había prestado demasiada atención, conocí un sentimiento único, un sentimiento que solo pocas personas experimentaron en su historia. Mientras llegaba a ese lugar pocas veces visitado, observe una estrella que desde ese momento iba a empezar a iluminarme. Llegaba el verano y parece que también llegaba el momento de soñar, ya no solo, sino de dos. Verte era una tentación, verte era locura, verte sigue siendo lo más precioso de mi singular mundo. Mis ojos te miraban al llegar, los tuyos miraban los míos y los inducían a soñar, la horizontalidad con que se mira la vida al caminar no cabe en una mirada acostumbrada a verlo todo en vertical, desde abajo hacia arriba, como intentando comprender y descubrir la personalidad, lo maligno, lo nocivo antes de conocerla, pero con aquella persona todo era diferente, la seguridad y la felicidad dominaban mis días. Esas miradas solo vieron amor en sus pares, vieron locura y pasión, cariño, suavidad, amor, ternura y calor. En esas noches la brisa apaciguaba corazones que latían suplicando por labios, se conocieron dos almas, se comieron muchos helados, se sonrío sin pausa. También con algo de suerte, y con una manera muy poco lógica se conocieron abrazos, abrazos que llenan el alma, abrazos que resultaron ser la inherencia de dos cuerpos. Mas tarde llegó la hora de los besos, en ese momento noté como se exiliaron todos mis verbos, uno a uno se fueron yendo en un segundo, me quede sin palabras y esperando el resto de la noche a que se duerma la luna. La palabra “amor” y su nombre solo comparten una letra, la primera, la paradoja de esta historia es que justamente esta persona fue la única que me demostró lo que es verdaderamente el amor. Te escribo a vos por que llegaste a mi vida y sin permiso me hiciste feliz, llegaste a mi vida y la adornaste con sonrisas. Me enseñaste a dejar atrás a mi mundo sin esperanzas y me mostraste este mundo sin fronteras y con muchas cosas por descubrir. Cuando mi mundo consistía siempre en no ganar, me enseñaste a que se puede apostar y ganar. Espantaste todos los ecos de angustia en mi mente, corrieron al ver tu figura. Lograste que me sienta más feliz que nunca, por eso y miles de cosas mas te escribo y te puedo decir con total seguridad que sos la mujer que busque toda mi vida, que sos el amor de mi vida y lo mas hermoso que tengo.-

martes, 24 de mayo de 2011

El Cazador ll

En el inmenso y espeso bosque, asecha a sus presas,  atrayéndolas con un rugido desgarrador y una única forma de mirar. Cada paso hacia adelante es una victima que cae, cada paso hacia atrás es un retroceso esquizofrénico con deseo de no volar.  Tu piel busca respuestas a sus ataques violentos  y encuentra una única salida, el silencio. Tu rostro intenta escapar del deseo explícito de correr y por unos segundos logra sumergirse en un mar de reposo, sin agua, pero con palabras, palabras que emergen en cámara lenta como si ésa tinta escrita intentara ser más liviana que el resto para subir rápidamente a la superficie. Una noche el sol se apago, pero a la mañana siguiente volvió a renacer, el brillo de tus ojos, se encienden durante el día y se apagan durante la noche. Encontrar palabras que escriban los días se hace difícil, describir los sentimientos es imposible.