viernes, 26 de febrero de 2010

Aflicción


Que triste cuando hay que elegir: ¿el o ella? ¿Aquel o aquella?,  las preguntas que no tienen respuestas, esos interrogantes que duelen en el alma: ¿Cómo se aprende a amar?  ¿Cómo pintar un corazón en un cuerpo vacío? Siempre me pregunte eso, nunca me salio dibujar un corazón hasta que ella me dijo que un corazón se pinta como si fueran dos signos de interrogación uniéndose para siempre y después rellenando ese dibujo con el color de la sangre, uniendo dos signos que en el fondo son iguales pero invertidos, como si lo conocido y lo desconocido estuvieran destinados a alcanzarse, a no separarse jamás.
Que triste cuando te mienten, que tristes que son los silencios, los te amo pero te olvido, los que hablan por atrás, lo que por atrás se esconden,  los árboles que se caen en primavera, las hojas que tocan suelo en otoño y el frío de invierno que todo lo congela.
Pero que lindo es elevarse en un cielo de dos, ser la sombra del sol, ser el riel de un subte interminable de pasión, ser una de las dos columnas que sostienen un inagotable sentimiento de dos personas destinadas a soñar en el mismo lecho.

3 comentarios:

  1. Es tuyo ? me gusta! me gusta la metafora de los interrogantes y del corazon y de mas. muy bueno y si no es tuyo sos un chanta y yo una ignorante XD jaja.
    Saluditos

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  3. Me encantó.
    Definitivamente,la metáfora sobre los corazones,las interrogantes recurrentes,y el destino de esos amores,me fascinaron!
    Un saludo ;)

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